Que el sueño, la fatiga o la falta de iluminación no te venzan: te damos algunos consejos para conducir de manera segura durante la noche.

Cuando cae el sol, conducir puede ser un reto mayor porque los conductores dependen de
iluminación artificial para transitar por oscuras carreteras. Esto puede generar más accidentes ya que dificulta ver la calle, señales de tráfico, peatones, animales que cruzan la vía y otros vehículos. Esto ocurre porque la percepción de profundidad, la visión periférica, e incluso el reconocimiento de colores suelen disminuir al haber menos luz.

Pero hay otros factores que hacen de la noche un momento más peligroso. Según reportes del Departamento de Seguridad Vial y de Vehículos de Florida (FDHSMV, por sus siglas en inglés), es más frecuente encontrar accidentes con conductores ebrios en horario nocturno (especialmente en los fines de semana), así como también conductores privados de sueño (que tienen menor capacidad de respuesta ante imprevistos, lo que constituye un riesgo en carretera).

Aún así, muchas personas prefieren circular de noche porque hay menos tráfico y se puede ir a mayor velocidad con las vías despejadas. Pero para que el recorrido sea seguro hay que seguir algunas pautas:

– Reduce la velocidad
– Mantén una distancia de seguridad
– Aumenta la frecuencia de las paradas
– Apóyate en los retrovisores
– Detente al primer síntoma de fatiga
– Si es posible, usa las luces altas

Reduce la velocidad
Aunque la pista esté vacía, no caigas en la tentación de ir demasiado rápido, recuerda que la causa más frecuente de accidentes es el exceso de velocidad. No tienes por qué ir lento, pero una buena medida es poder detener totalmente el vehículo dentro del campo de iluminación de los faros en caso de emergencia.

Mantén una distancia de seguridad
Si hay más vehículos en la carretera, no vayas muy cerca del que tienes delante. Según la velocidad con la que se vaya moviendo el tránsito, puedes calcular al menos tres segundos entre el tuyo y los vehículos de adelante y atrás.

Aumenta la frecuencia de las paradas
Aunque quieras llegar pronto, toma en cuenta que el cansancio puede jugarte una mala pasada y esto es más frecuente de noche. Para cada cierto tiempo para descansar las piernas, tomar o comer algo ligero, y limpiar bien los cristales de tus lentes para no entorpecer tu visión.

Apóyate en los retrovisores
En el día, todo es más claro, pero en la noche es importante que hagas uso de todas las herramientas posibles para que no pierdas ningún ángulo de visión. Mientras vayas manejando, recuerda chequear los retrovisores cada 10-20 segundos, para anticipar cualquier eventualidad.

Detente al primer síntoma de fatiga
Si te sientes cansado, comienzas a bostezar o sientes algo de sueño, lo ideal es detenerte. Estira las piernas, toma algún alimento o bebida energizante, y si es posible, túrnate con otro conductor por un tramo, mientras te recuperas. Si estás muy cansado, no dudes en dormir un rato.

Si es posible, usa las luces altas
En carreteras donde no haya posibilidad de encandilar a otros vehículos, utiliza las luces altas que tienen un alcance más largo y te permitirá anticipar cualquier situación que te espere en la carretera. Sólo ten la cortesía de recordar que debes bajar las luces cuando se aproxime un vehículo de frente para evitar deslumbrar.

Si aplicas estos sencillos consejos manejar de noche puede ser una experiencia placentera y segura, que puedes reforzar teniendo siempre a mano el contacto de tu Agente de Accidentes, siempre atentos a darte asistencia en caso de que lo necesites.

*No somos médicos ni abogados. Nuestros comentarios no son consejos con base legal.